Fácil de manejar y utilizar, la bicicleta acuática es ligera, cómoda y flota en el agua con facilidad. En grupos de hasta seis personas, tres guías lideran el recorrido, hablando de las bellezas y peculiaridades de la región y ayudan durante todo el recorrido que sale de la orilla hacia las piscinas naturales de la región, con parada para baño y fotografías.
En un entorno paradisíaco, con un mar azul cristalino, es posible observar corales de toda la región, con mucho cuidado para que la bicicleta no se apoye sobre los corales. Los guías te ayudarán con estas maniobras, que son fáciles. Desde el mar la vista de la playa es perfecta, la combinación de mar, cocoteros verdes y arena blanca es inolvidable.
Para realizar la visita grupal y guiada es necesario reservar con antelación. A pesar de salir diariamente, la salida depende de la marea y los horarios varían según la naturaleza. En las noches de luna llena, el recorrido también se realiza de noche. Conviene consultar el período lunar antes del viaje, ya que también depende de la tabla de mareas. También es posible utilizar la bicicleta solo, sin guía ni grupo, con un coste fijo cada treinta minutos.
El uso de la bicicleta es para todas las edades, las restricciones son de altura -debes medir más de 1,40 m- y peso, máximo 120 kg, para un buen manejo del equipo. La misma recepción ofrece paseos en kayak y stand-up paddle, también a precio fijo cada treinta minutos. Para estos no es necesario reservar con antelación.